Hoy, Chloe, se ha marchado al que será sin duda su nuevo hogar para siempre. Una familia de la ciudad de Frankfurt la ha adoptado.
Hemos compartido juntas 34 inolvidables días y 500 son las noches que tardarán Cristina y Biel en poder hablar de ella sin que se les haga un nudo en el estomago.
Todos sabíamos que Chloe estaba en acogida y que en algún momento alguien la adoptaría, pero aun sabiéndolo, cuando llega el momento de las despedidas, la cosa se hace realmente dura.
Esta mañana en el aeropuerto, de camino a su nuevo hogar, me ha puesto una patita encima, como diciendo "hasta pronto, Lana, me lo he pasado genial contigo y te echaré de menos", a lo que yo le he correspondido con el mismo gesto de amistad y cariño.
Se va de casa con un carácter y un físico diferente del que hace poco más de un mes llegó.
Está físicamente más fuerte, ha cogido unos kilos que le hacían falta y sus patas y olfato están ahora más desarrollados (a ver si encuentras conejos en la nieve...)
Llegó teniendo miedo de mi y de los amitos, no se separaba de Cristina más de dos metros. Ahora se va mucho más segura de si misma, con más carácter y con su simpatía y ganas de que le hagan cariños a todas horas.
La separación ha sido dura, pero han sido 34 días fantásticos y estarás siempre en nuestras mentes y corazones.
Esperamos ansiosos alguna foto de su nuevo hogar en cuestión de días, así que no desaparecerás de nuestras vidas tan fácilmente.
Me lo he pasado genial contigo, colega !
Encantados de haberte conocido